«Los inmigrantes no son un problema para el país – dijo Oscar Rementería, vicepresidente del Partido Amplitud, agregando: – Son una oportunidad de desarrollo y de recibir a nuevos chilenos que quieren establecer sus proyectos de vida en nuestro territorio», agregó.
Según el dirigente, el país debe prepararse para recibir a los «nuevos chilenos», y para eso el Estado debe crear a lo menos tres nuevos organismos: el Servicio Nacional de Migrantes, dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores o Justicia y que reemplace al actual Departamento de Extranjería; el Instituto contra la Discriminación, el Racismo y la Xenofobia, cuya función
será educar e implementar nuevas políticas públicas inclusivas; y el Consejo Nacional de Migrantes, compuestos entre otros por la sociedad civil y cuya misión sea proponer al Ejecutivo nuevas leyes y normativa para insertar integralmente a la nueva población nacional.
Desde el punto de vista de ese partido, explicó «ningún inmigrante, ningún extranjero, ningún ser humano es ilegal. La propuesta de Chile Vamos apunta a tratar como criminales a toda persona que lleguen a vivir a nuestro país, lo cual atenta contra los Derechos Humanos»
Las declaraciones fueron reproducidas por el periódico digital EMOL, ayer 29/11/16, en el marco de una polémica surgida por la propuesta de la coalición opositora Chile Vamos, que busca inhibir y criminalizar la migración, un fenómeno que se está haciendo cada día más notorio en el país.
En el caso de Haití, se supone que casi 50.000 personas llegarán desde ese país durante el próximo año. La propuesta de los partidos conservadores (UDI/RN/Evopoli, PRI) ha vinculado la inmigración con la delincuencia, desatando una polémica donde han sido catalogados de repetir las odiosidades que se han manifestado en EE.UU.