Diversos medios informaron el lunes y martes, sobre los resultados de la encuesta CADEM, sobre la disminución del margen que separa al ex presidente Sebastián Piñera del senador Alejandro Guillier, en las opciones presidenciales que maneja la opinión pública. A pesar de que ninguno ha señalado su decisión de ser candidato presidencial, ante la pregunta “Por quién votaría usted si las próximas elecciones presidenciales fueran este fin de semana», el primero obtuvo un 22% de las preferencias, y el segundo un 18%, siendo seguidos con un porcentaje muy menor por Ricardo Lagos Escobar (5%) y Manuel José Ossandón (4%).
Otras encuestas han dado en semanas anteriores un virtual empate entre Piñera y Guillier.
Las demás opciones parecen quedar absolutamente rezagadas a lo simplemente testimonial, al punto que las primarias previstas para el año próximo parece ser una dato que la opinión pública parece no tener dentro de su interés objetivo y podrían ser absolutamente irrelevantes, en la medida que se posterguen más allá de marzo.
Con todo, la encuesta más sintomática sería aquella que se haga a encuestados que efectivamente hayan votado en la pasada elección municipal, ya que ella daría indicios ciertos de lo que opinan quienes con seguridad irán a votar en las presidenciales de 2017.
La figura del senador Guillier, objeto del fuego amigo de su propia coalición, sigue consolidándose a pesar de su ambigüedad en presentarse abiertamente como candidato. Pareciera que la ambigüedad hoy es una estrategia que genera resultados, considerando que los dos candidatos preferidos por los encuestados declaran no ser candidatos, y quienes derechamente han expresado su interés en postular, están en torno al 5%.
Ninguneado por la macuquería de la partitocracia, el senador, sin embargo, se asienta firmemente en la opinión de la gente. Quienes han analizado los pronunciamientos del senador, desde la cercanía a su opción, consideran que debe abstenerse de seguir refiriéndose a los ataques de que es objeto, ya que ello terminará desgastándolo, por lo que esa tarea debe ser abordada por aquellos que son parte de su círculo de consejeros.
