Las leyes sobre la blasfemia fueron abolidas en Inglaterra y Gales en 2008, tras una larga campaña de la Sociedad Nacional Secular (NSS). Ahora la NSS pidió la derogación de la ley de blasfemia de Irlanda después de que la policía irlandesa pusiera fin a una investigación contra Stephen Fry sobre una queja de «blasfemia» relacionada con una entrevista transmitida en 2015. Fry (en la foto) es un comediante, actor, director y escritor británico, considerado entre los cincuenta mejores cómicos de la historia, y es bien conocido por su agudo cinismo y su peculiar estilo del humor típicamente británico.
En la entrevista se le preguntó a Fry qué le diría a Dios, y él respondió: «¿Cómo te atreves a crear un mundo en el que hay tal miseria, no es culpa nuestra, no es correcta, es totalmente, completamente mal». Y agregó: «¿Por qué debo respetar a un dios caprichoso, mezquino y estúpido que crea un mundo tan lleno de injusticia y dolor?»
Un integrante del público se quejó a la policía en 2015. Inicialmente no se tomó ninguna medida, pero luego, hace unas semanas, el denunciante fue contactado por un detective que dijo que estaban investigando el caso. El querellante dice que le preguntaron si estaría dispuesto a hacer una «nueva declaración más detallada».
Según la Ley de difamación de Irlanda de 2009, es ilegal publicar o pronunciar un asunto que sea «groseramente abusivo o insultante en relación con asuntos sagrados de cualquier religión, provocando intencionalmente indignación entre un número considerable de adherentes de esa religión». Se sanciona con una multa de hasta 25.000 euros.
La Sociedad Nacional Secular acogió con beneplácito la decisión de no procesar a Stephen Fry, pero advirtió que la razón dada por la policía sólo «incentivaría la indignación».
El director de las campañas de la NSS, Stephen Evans, dijo: «Ateos, cristianos, ex musulmanes y toda una gama de minorías enfrentan persecución en todo el mundo musulmán, donde las leyes de blasfemia se usan para silenciar la disidencia y expulsar a las minorías religiosas. De la blasfemia pueden incitar a linchar a las turbas.
«¿Cómo puede Irlanda, o cualquier otro país con una ley de blasfemia, hablar con toda credibilidad contra estos atroces abusos contra los derechos humanos?
«Tener una ley arcaica que no se aplica es bastante malo, pero la investigación contra Stephen Fry indica que la policía está preparada para hacer cumplir activamente la ley, y este es un signo profundamente preocupante”.
El Ministro de Salud de Irlanda, Simon Harris, uno de las autoridades políticas que reaccionó frente a la investigación, dijo que la ley de blasfemia era «embarazosa» y debería ser eliminada a través de un referéndum constitucional.
