El derecho de la mujer a vivir una vida sin violencia, ha sido destacado por Carolina Carrera, Presidenta Corporación Humanas, en una columna de opinión publicada la página web del Observatorio de Género y Equidad, de hace algunas semanas, y que Iniciativa Laicista quiere reponer en la reflexión de esta semana.
La realidad en Chile, respecto de la violencia contra la mujer, dice Carolina Carrera, no es disímil a lo que ocurre en América Latina.
Aún tenemos en nuestra retina la muerte de la niña Florencia Aguirre que fue quemada por su padrastro, Johana Soto embarazada y asesinada por su pareja o el de Claudia Nuñez cuyo cuerpo fue encontrado en un contenedor de basura.
Sus muertes vienen a engrosar los 50 femicidios que se registran a la fecha, según cifras de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, y los 110 femicidios frustrados.
Los asesinatos de niñas, adolescentes y mujeres por razones de género y la impunidad en muchos de ellos, ha impulsado un grito de justicia bajo la consigna #NiUnaMenos.
Las cifras hablan por sí solas y alientan, por parte de organizaciones de mujeres y feministas, la demanda de una alerta de género. Reiteramos lo que hemos dicho insistentemente:en Chile la vida de las mujeres vale menos que los delitos contra la propiedad privada.
Pese a todos los antecedentes y al impacto que generan los femicidios, aún sigue pendiente la promulgación de una ley integral de violencia contra las mujeres. Recientemente, senadoras/es de distintos sectores políticos han llamado al Ejecutivo a dar urgencia a la iniciativa que modifica la ley N° 20.066, sobre violencia intrafamiliar, en lo relativo a las medidas de protección a las víctimas
La violencia contra las mujeres tiene distintas expresiones – señala Carolina Carrera, y agrega: – La encuesta de Corporación Humanas muestra que el acoso sexual es una forma de violencia contra las mujeres.Un 88% señala que la mayoría de las mujeres es acosada sexualmente alguna vez en su vida y un 70% advierte que las mujeres son acosadas en la calle.